Román Pérez, María Bermúdez, Aoife, Samuel Seoane, Anxo Martínez e Juan Sendón.

Román Pérez, María Bermúdez, Aoife, Samuel Seoane, Anxo Martínez e Juan Sendón.

 
Investigadores de la Universidad de Santiago y del Hospital de Jove de Gijón han conseguido frenar el cáncer de mama utilizando un nuevo tipo de células madre en el cuello uterino. Según los investigadores, este nuevo tipo de células madre mensenquimales extraídas del cérvix uterino no sólo actúan sobre el tumor, también frenan su progresión. Además, se extraen de una forma muy sencilla, a partir de un cepillado del cuello del útero como el que se realiza en las conocidas citologías. 
 
Estos científicos han demostrado la capacidad de las células madre uterinas para inhibir la proliferación e invasión de células tumorales, estimulando su muerte celular programada (apoptosis). Este efecto inhibidor sobre el crecimiento tumoral lo observaron  in vitro utilizando células de tumores de cáncer de mama y cultivadas a partir de pacientes operados de esta enfermedad, así como in vivo en ratones. Se trata de una especie de «caldo nutritivo» denominado ‘medio condicionado’. Este cóctel de sustancias fue inoculado en ratones con cáncer de mama. Después de semanas de evolución se observó que el tumor era más pequeño y que no crecía  en la misma proporción que el otro grupo de ratones que no habían recibido el mismo tratamiento. Para probar la efectividad de la terapia celular se utilizó el cáncer más agresivo y resistente: el triple negativo.
 
Los resultados de la investigación han sido publicados en la revista estadounidense Oncotarget y ha recibido el Primer Premio a la Mejor Comunicación Científica en el IV Congreso Mundial sobre Ciencia Celular e Investigación con Células Madre celebrada a finales de junio en Valencia.
 
Colaboración
Esta investigación sobre las células madre se inició hace cuatro años, en los laboratorios de la Unidad de Investigación de la Fundación Hospital de Jove de Gijón que dirige el Dr. Francisco Vizoso. Su objetivo era encontrar una nueva fuente de células madre, un método para obtenerlas que no fuera invasivo y doloroso para los pacientes y, además, que las células se pudieran reproducir fácilmente en el laboratorio.
La investigación ha sido financiada por la Fundación para la Investigación sobre Células Madre Uterinas (FICEMU), gracias a la solidaridad de los ciudadanos, y ha contado con la participación del profesor de la Universidad de Santiago, Pérez Román; el profesor Joseph Schneider, de la Universidad Rey Juan Carlos y la colaboración de pacientes.
 
0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta