La Sociedad Española de Meditación imparte talleres para personas con problemas de salud y formación gratuita en colaboración con asociaciones. En los cursos, “se enseñan técnicas para reducir el estrés, fortalecer el sistema inmunológico y estar más en paz, de modo que el cuerpo reaccione mejor ante la enfermedad”, explica Ramón Leonato, director del programa educativo. No es lo mismo “que estés tranquilo o tengas técnicas para relajarte cuando padezcas ansiedad que estar estresado”, reconoce.
Meditar puede ayudar en el proceso: “en ese camino árido desde que te anuncian que padeces cáncer, entras en tierra de nadie y empieza un juego emocional que se suma a lo físico”. Y por eso, “es útil ante síntomas emocionales como la desconfianza, el estrés, la falta de compromiso con el tratamiento…”, explica Rodrigo Jarpa, coach y terapeuta.
“Meditar te cambia la vida”
Entre otros beneficios, “muchos pacientes indican una mejora sustancial en el sueño y el descanso”. Además, “se entrena a la persona para entrar en estado meditativo y poder gestionar mejor el dolor, desarrollar el pensamiento positivo y salir de las consecuencias de la enfermedad, para penetrar en una dimensión mayor sin perder de su vida las partes que funcionan y son ricas en experiencias positivas. Esto redunda en un mayor aprovechamiento del tratamiento y una reducción sustancial de sus efectos negativos”, asegura Jarpa, quien es monitor en acompañamientos de meditación en la Asociación de Oncología Integrativa.
A mí, “la vida me cambió con la meditación”, reconoce Olga, expaciente de linfoma. “Yo dormía fatal, con pastillas, y la meditación regula los ciclos del sueño, disminuye la ansiedad, te da calma, desarrollas el pensamiento positivo, la empatía… Aprendes a vivir el presente, porque muchas veces estás planeando el futuro y lo que tenemos que aprender es a vivir ahora”. Entre esos efectos beneficiosos de la meditación, “la mayoría coincidimos en que regula muy bien el sueño, baja la ansiedad y aprendes a no agobiarte demasiado y vivir el día a día”.
Según la Asociación Oncología Integrativa, la práctica habitual produce relajación, paz mental, mejor capacidad para gestionar el estrés y un mayor desarrollo del pensamiento creativo. “Es imprescindible bajar ese nivel de estrés, y ahí es donde vemos el resultado: meditar reduce la ansiedad y eso favorece tanto en el tratamiento como en la mejora de la autopercepción, da mayor confianza y seguridad en los recursos del organismo para responder, y también mejora la comunicación con el entorno”, explica Rodrigo Jarpa.
“Afrontar el día y vivir”
Para este terapeuta, “el entorno es algo que no suele ser muy atendido; el conjunto de cuidadores es tan importante como el paciente: personas del entorno familiar, laboral o estudiantil…”. Quienes están más comprometidos emocionalmente, explica, sufren alteraciones emocionales y el mismo tipo de estado de incertidumbre que lleva a la ansiedad y el estrés, el no saber comunicarse, irritabilidad, rabia contra el mundo… “Es importante atender también esas necesidades de los más allegados, y en este sentido, la meditación es muy buena acompañante para bajar el ruido mental, abrirse a otras posibilidades y comunicar desde otro lugar, no desde la reactividad y la preocupación”.
Meditar permite “transformar esa idea de luchar contra el cáncer en gozar de la vida, salir de ese estado enfocado de luchar ‘contra’ para luchar ‘para’ lo que quiero: vida y salud”. Ahora bien, “soy opuesto a vender la ‘aspirina’ de la meditación como la solución a cualquier problema, pues, en la travesía de distorsión emocional, que nunca es igual, el acompañamiento ha de ser a medida”. “Cada persona y no ‘todo el mundo’ necesita la meditación. Quienes no hemos desarrollado la capacidad de gestión de las emociones somos quienes la necesitamos”, asegura.
Olga reconoce que “a lo mejor el nombre te provoca rechazo, porque hasta que no lo conoces te da cierto reparo, pero meditar te cambia la vida, aprendes a afrontar el día y a vivir”.
Sociedad Española de Meditación: http://www.meditaya.com
Asociación Oncología Integrativa: http://www.oncologiaintegrativa.org/
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!