Cómo cuidar tus tatuajes

Sabemos que los tatuajes están más de moda que nunca. Existen desde siempre en las tribus y, a lo largo de los siglos, ha sido una seña de identidad de los prisioneros y marginados hasta convertirse hoy en día en algo muy normal en cualquier persona. En el cáncer, no obstante, cuando nos referimos al tatuaje se suele hablar de micropigmentación terapéutica.

En cualquiera de los dos casos, hay ciertas precauciones y cuidados que se deben adoptar tras realizarse un tatuaje. El Dr.  Juan Arenas, asesor médico de Eucerin®, nos recomienda una serie de consejos para evitar infecciones:

 

  1. Dejar tapada la zona entre 2 y 4 horas para protegerlo. Si tras la realización de un tatuaje se pone plástico sobre la piel, retirar inmediatamente para evitar la acumulación de sangre y fluidos.
  1. Limpia el tatuaje 2 ó 3 veces al día con agua tibia y un jabón neutro que no contiene detergentes y cuida la piel extremadamente sensible. El secado debe ser cuidadoso y sin raspar la zona del tatuaje.
  1. Hidrata la herida. Utiliza diariamente una crema específica para hidratar la zona. Su alto contenido en ingredientes hidratantes acelera el proceso de regeneración y curación de los tatuajes.
  1. ¡Cuidado con el agua! La ducha diaria no es un problema; pero hay que tener la precaución de no empapar el tatuaje y aclarar deprisa el jabón o champú que caiga encima. Nunca pases de manera agresiva la esponja o la toalla. Es importante no pasar mucho tiempo bajo el agua durante unas las 3 semanas posteriores a la realización del tatoo. Sumergir el tatuaje durante mucho tiempo puede dañarlo de modo irreversible. Conviene evitar bañarse en piscinas o en el mar en las 2 primeras semanas o hasta que el tatuaje cicatrice. La suciedad y las bacterias del agua pueden hacer que se infecte o, como mínimo, dañarlo.
  1. Protégete del sol. Es probable que el sol irrite la piel si el tatuaje es reciente y, en general, hace que pierda brillo o color. Eucerin recomienda sus protectores solares con factor 30 ó 50 para protegerlo de los rayos ultravioleta.
  1. Deja el tatuaje al aire. El tatuaje es una herida, por lo que evita taparlo con vendas, tiritas etc. pasadas las primeras horas después de hacértelo, así evitarás la infección de microbios anaerobios (los que se multiplican en heridas no lo bastante oxigenadas). Utiliza ropa cómoda y suelta que no oprima la zona del tatuaje.
  1. Busca señales de alergias o infecciones. Aunque tomemos todas las precauciones presta especial atención a sarpullidos, enrojecimiento, escozor y/o picor, fiebre o, si sale líquido de la herida, incluso después de curada, etc. En estos casos acude a un médico.
  1. No rascarse ni arrancar las costras. Un tatuaje suele tardar 1 ó 2 semanas en cicatrizar, según la zona donde esté y su tamaño.
  1. Pasado un mes, tu tatuaje ya habrá cicatrizado y, en principio, ya no debe infectarse. A partir de ahí basta con no exponerlo mucho al sol y usar un protector solar.

Lo hemos visto, hay que hidratar la herida, pero no con cualquier crema. Se puede elegir una pomada, como Aquaphor de Eucerin, que acelera el proceso de generación de la piel dañada y con erosiones cutáneas superficiales y, a su vez, favorece la cicatrización. Esta crema es recomendable tanto en caso de tatuaje, pigmentación o tras una radioterapia. Sus ingredientes (Dexpantenol que estimula la regeneración; Bisabolol que suaviza; Glicerina para hidratar la piel; Alcohol de lanolina que actúa como emoliente ; Petrolato que suaviza y protege) calman la piel. También se puede usar en pieles de bebés. Está libre de perfume, alcohol, colorantes; es hipoalergénica y no comedogénica.

Se puede aplicar varias veces al día, masajeando suavemente la zona afectada. 40 g – 9, 15 €; 99 g – 15, 75 €

 

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