INGREDIENTES
- Polenta
- Orejones
- Pasas
- Mermelada de fresas o compota de fresas casera endulzada con sirope de ágave (o cualquier tipo de fruta)
Pon en una cazuela una medida de polenta por cuatro medidas de agua y ponlo a cocer a fuego medio. Añade las pasas u orejones cortados en daditos. Déjalo cocer hasta que el agua se integre. Después, la polenta debe solidificarse, así que debe reposar hasta que esté frío. A la mañana siguiente, estará lista para que cortes una porción de tu pastel y le añadas compota de fresas. Acompáñalo con una leche vegetal con semillas de cáñamo.
Consejos
Cuando se trata de comer durante el tratamiento contra el cáncer, es importante dar prioridad a una nutrición adecuada para apoyar su salud y bienestar general. He aquí algunos consejos generales que pueden ser útiles:
- Consulta a un profesional sanitario: Es fundamental que colabores estrechamente con su equipo sanitario, incluido un dietista titulado, que puede proporcionarle orientación personalizada en función de tus necesidades específicas y tu plan de tratamiento.
- Siga una dieta equilibrada: Intenta incluir en sus comidas una variedad de alimentos ricos en nutrientes. Esto incluye frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables. Intenta incorporar diferentes colores y texturas para que tus comidas sean más apetitosas.
- Manténte hidratado: Beber suficiente líquido es importante para prevenir la deshidratación. El agua, las infusiones y los caldos claros pueden ser buenas opciones. No obstante, consulta con tu equipo médico si tienes alguna restricción de líquidos.
- Controla los efectos secundarios: Los tratamientos contra el cáncer pueden provocar efectos secundarios que afecten al apetito y a la capacidad de comer. Por ejemplo, son frecuentes las náuseas, los cambios de gusto y las llagas en la boca. Habla de estos temas con tu equipo sanitario, ya que pueden proporcionarte estrategias para controlar estos efectos secundarios y sugerirte alimentos o métodos de cocción alternativos.
- Coma comidas más pequeñas y frecuentes: Si te resulta difícil hacer comidas copiosas, intenta hacer comidas y tentempiés más pequeños y frecuentes a lo largo del día. Esto te ayudará a ingerir suficientes nutrientes y calorías.
- Considera la posibilidad de tomar suplementos nutricionales: En algunos casos, tu equipo médico puede recomendarte suplementos nutricionales para ayudarte a cubrir tus necesidades nutricionales. Pueden presentarse en forma de batidos, polvos o barritas. Sin embargo, es importante que consultes con tu equipo sanitario antes de empezar a tomar suplementos.
Recuerda que las necesidades nutricionales de cada persona durante el tratamiento del cáncer pueden variar, por lo que es fundamental que colabores estrechamente con tu equipo sanitario para desarrollar un plan individualizado. Ellos pueden ofrecerte la mejor orientación en función de tu situación específica.
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