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Entendemos por cáncer el conjunto complejo de enfermedades cuya característica común es el crecimiento descontrolado de células anormales. En los países desarrollados, es la segunda causa de muerte, detrás de las enfermedades cardiovasculares. Un tercio de las muertes por cáncer, están relacionadas con factores de riesgo tales como; IMC elevado, ingesta insuficiente de frutas y verduras, falta de actividad física. Sin olvidar, la influencia del alcohol, el tabaco y la polución atmosférica.

Prevalencia de la malnutrición en pacientes oncológicos 

La prevalencia de la malnutrición en pacientes oncológicos es superior a la de cualquier otro grupo de pacientes hospitalizados. En su forma mas severa, la malnutrición asociada al cáncer se denomina «síndrome de anorexia-caquexia».

La forma mas común de desnutrición en estos pacientes es la proteico-calórica y es un indicador de mal pronóstico, que se asocia a una alta tasa de mortalidad ya que en un paciente mal nutrido aumenta mucho la probabilidad de morbilidad y padecer enfermedades asociadas

Independientemente de las alteraciones nutricionales producidas por el propio tumor, las terapias antineoplásicas pueden condicionar una ingesta disminuida, una disminución de la absorción de nutrientes o provocar alteraciones en el metabolismo. La falta de especificidad de la quimioterapia puede dar lugar a efectos adversos que indirectamente comprometen la nutrición del enfermo.

Por todo ello, hoy en día, se tiende a terapias dirigidas que vayan justo al tumor y no actúen en otras zonas.

Por su parte, los efectos de la radioterapia dependerán de la propia región irradiada. Una característica de la misma es la duración de efecto, una vez acabada la radiación los efectos permanecen muchos meses después.

La anorexia (pérdida del apetito o del deseo de comer) es un síntoma común en las personas con cáncer. Se puede presentar temprano o tarde durante el curso de la enfermedad, si el cáncer crece o se disemina. Algunos pacientes ya sufren de anorexia cuando se les diagnostica la existencia del tumor y casi todos los pacientes de cáncer avanzado tendrán anorexia. Esta es la causa más común de desnutrición.

La alimentación en un lugar tranquilo y confortable, y el ejercicio regular pueden mejorar el apetito. Las siguientes sugerencias pueden ayudar a los pacientes de cáncer que perdieron su apetito, pero antes establecemos la diferencia entre los distintos tipos de malnutrición:

Anorexia: pérdida de apetito.

Caquexia: síndrome multiorgánico que incluye anorexia.

Tratamiento

En la mayoría de los pacientes, la vía oral bien supervisada es la vía más segura y eficaz. Pero para que la vía oral se pueda llevar a cabo es necesario asegurarse de que el aparato digestivo funciona correctamente. Por otra parte, será también importante asegurarse de que el paciente va a ser capaz de mantener una correcta ingesta proteico-calórica.

Se recomienda realizar un cuestionario, a través del cual se va a poder conocer con exactitud, el tipo de alteraciones y su intensidad, que desde el punto de vista del apetito, la digestión, la absorción y el metabolismo de los nutrientes, el enfermo presenta.

Así, según el resultado, se podrá aconsejar la dieta oral adecuada.

Va a ser importante tener en cuenta que los enfermos con cáncer tienen un alto grado de falta de apetito, con una palatabilidad por los alimentos muy especial; mostrando muchos de ellos una gran preferencia por los dulces y una llamativa aversión por la carne.

Por ejemplo, el cuestionario de Ovensen hace las siguientes preguntas:

¿Ha notado cambios en el gusto?

¿Ha notado cambios en el olfato?

¿Tiene dificultad para deglutir?

¿Nota la boca seca?

¿Tiene náuseas o vómitos?

Síntomas 

  • Pérdida de peso
  • Saciedad temprana
  • Anorexia
  • Estreñimiento
  • Xerostomía o boca seca
  • Cambios en el gusto
  • Náuseas
  • Vómitos
  • Heridas o infecciones bucales

Sugerencias

Las recomendaciones generales durante el tratamiento podrán centrarse en el consumo de alimentos con un alto contenido energético, proteico, así como rico en micronutrientes a fin de ayudar a mantener el estado de nutrición.

Para cada uno de estos síntomas, podemos ofrecer unas recomendaciones, para que estos sean cada vez de menor intensidad:

  • Alimentarse con raciones de comidas pequeñas ricas en proteínas y calorías .Hacerlo cada 1 o 2 horas, en lugar de tres comidas importantes.
  • Agregar más calorías y proteínas a los alimentos con manteca, leche en polvo desgrasada, miel o azúcar morena que son ricos en calorías y proteínas.
  • Para aquellos que sienten náuseas se recomienda preparar y congelar porciones pequeñas de los alimentos preferidos.
  • Buscar alimentos atractivos al olfato.
  • Consumir una tercera parte de las necesidades de proteínas y calorías en el desayuno.
  • Comer algo ligero entre comidas.
  • Experimentar con diferentes alimentos.
  • Practicar hábitos de higiene bucal como gárgaras  con bicarbonato.

Finalmente, otras recomendaciones que pueden ser muy prácticas son:

  • Ser flexible, comer solo cuando se tenga hambre.
  • Utilizar utensilios de plástico.
  • Hacer que otras personas preparen la comida.
  • Probar alimentos nuevos cuando se esté mas animado.
  • Chupar caramelos de limón sin azúcar, chicles o pastillas de menta.
  • Hacer planes para comer con familia y amigos.
  • Comer carne con algo dulce.

 

 

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