Hace poco, hablamos del maquillaje de las cejas, pero ¿y el resto de la cara? Aunque no siempre nos gusta maquillarnos, para tener buen aspecto, no hace falta ni mucho tiempo ni tampoco grandes recursos. Os explicamos los gestos para estar radiante en pocos minutos.
Ante todo, y eso antes de dibujarse las cejas, debemos aplicar una base para unificar nuestra piel y quitar las pequeñas irregularidades. Se puede usar un pincel o una esponja.
Luego, con un pincel, se aplican los polvos llamados bronceadores para iluminar la cara en las zonas siguientes: centro de la frente, tabique de la nariz, pómulos y mentón.
Paso siguiente: iluminar nuestras mejillas con un colorete. En este caso, tenemos unos polvos «Mosaïque» que nos permiten jugar con los diferentes tonos de la paleta, según nuestras necesidades.
Continuamos con los ojos. Con un pincel, delineamos la parte superior del ojo, lo que permite resaltar nuestra mirada.
Para acabar, aplicamos una máscara de pestañas (el color marrón suaviza la mirada).
Finalmente, dibujamos primero el contorno de nuestros labios antes de pintarlos.
Llegamos al toque final, aunque os aseguro que, una vez probado, vais a repetir este gesto. Para que el maquillaje no se mueva, basta con pulverizar un poco de agua termal en la cara.
El resultado final es estupendo y Catalina está guapísima.
Gracias a Joelle Nonni y a todo el equipo de Avène por esta clase magistral.
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